lunes, 14 de enero de 2008

"El espejo que tiembla" de Abelardo Castillo

No hace mucho tiempo que me he puesto a leer de nuevo con dedicación. A leer en serio digo, cosa que realmente no hacía desde hacía varios años. ¿Qué pasó? Bueno, yo mejor diría: ¿Qué no pasó?. Aunque tal vez ninguna de las cosas que a uno "le pasan" en la vida es motivo para apartarse de la lectura si realmente uno disfruta de ella.

Más allá de los motivos por los cuales mi hábito de la lectura entró por varios años en "receso", les quiero comentar cómo estoy empezando a ponerme en estado como lector otra vez. Como no sería de extrañar, comencé con varios libros a la vez, el primero de los cuales terminé este fin de semana: "El espejo que tiembla" de Abelardo Castillo. Los otros en el tintero son "El héroe de las mujeres" de Adolfo Bioy Casares, "El arte de viajar" de Manuel Mujica Lainez y "El interior" de Martín Caparrós (según el Negro Fontanarrosa "un libro de puta madre"). En la lista les sigue, y no por menos importante sino por orden de llegada (aunque tal vez se cuele por entre los demás y altere el orden por la curiosidad que me despierta y por la vigencia del mismo), "Golden Boys" de Hernán Iglesias Illia.

Como les decía, el primer libro que leo y termino con absoluta satisfacción después de un largo letargo como lector es "El espejo que tiembla" de Abelardo Castillo. Y creo que no pude escoger mejor libro para volver al ruedo. No sólo por el genio creativo y el humor de Castillo, fascinante desde todo punto de vista al menos para mí, sino también por su estilo y su técnica de escritura que hacen de su lectura un momento ameno, relajado y divertido.

"El espejo que tiembla" está compuesto por once cuentos cortos entre los cuales me resulta muy difícil elegir el mejor. Los dos que más disfruté son sin duda: "La cosa" y "El desertor" aunque realmente todos los cuentos de este libro me fascinaron.

Afortunadamente, "La cosa" fue transcripto en el diario "La Nación" por lo cual lo puedo compartir con ustedes en el siguiente link aunque recomiendo leer el libro entero.